ABC 26.01.13
Una de las simplezas que se oyen sobre la Primavera Árabe es
que fue una ofensiva del salafismo
El peor integrismo islamista sin duda puede ganar en el
norte de África y Oriente Próximo. Y convertirse en una terrible amenaza
inmediata para Europa al sur del Mediterráneo. Eso es posible. Pero que sea un
escenario posible no quiere decir que sea probable y mucho menos inevitable.
Egipto demuestra una vez más en estos días, dos años después de la caída de
Mubarak, que el radicalismo islamista, con todas sus victorias parciales, no
logra quebrar la resistencia de gran parte de la población. Lo cierto es que
nada está escrito. Una de las mayores y más frecuentes opiniones
simplificadoras que se oyen sobre la llamada «primavera árabe» es que no se
trata sino de una ofensiva victoriosa del peor radicalismo salafista,
disfrazado de movimiento democrático o popular, al que Occidente ha sido tan
idiota como para ayudar. Esa opinión da a entender que si Occidente hubiera
permanecido quieto, aquellos países serían hoy aún dictaduras «estables»,
moralmente repugnantes pero socios aceptables. Esto ya es en sí radicalmente
falso. Aquellas dictaduras cayeron porque la información y su incapacidad de
satisfacer las crecientes demandas las despojaron de toda legitimidad. Y las
vanguardias urbanas que encabezaron el principio de la insurrección estuvieron
dispuestas a morir por el cambio.
Alguna de aquellas dictaduras, como la libia, cayó con
intervención occidental, pero otras no la tuvieron. Y sí tienen intervención en
favor del dictador, como el sirio Al Assad con la ayuda rusa. Lo que no
impedirá que caiga más pronto que tarde.
Se sobreestima desde aquí la influencia occidental. Su
capacidad de influir para bien o para mal. Pretender por otra parte que en
aquellos países no hay otra opción que la peor y que todos ellos están
condenados al peor integrismo islamista, sea el iraní o el del salafismo, es
otra simpleza.
Estamos en un escenario nuevo, fluido, en el que lo único
que sabemos es que no tenemos ni idea del aspecto de la región dentro de una
década.
No hay comentarios:
Publicar un comentario